Última jornada del Nocturama 2019: Los Hermanos Cubero, Morgan, La Noche y Pío Paradox & Betty Miserias
El final siempre llega y la tercera jornada del Nocturama 2019 acogió el cuarteto formado por Los Hermanos Cubero, Morgan, La Noche y Pío Paradox & Betty Miserias a los platos. Sensaciones agridulces para una despedida.
El cartel de la noche final del Nocturama resultaba bastante ecléctico sin duda. Sobre el escenario de los Jardines del Casino de la Exposición, Los Hermanos Cubero iniciaban la que sería la última jornada de un evento histórico, culminando los festejos de su quince aniversario.
Con un recopilatorio recientemente publicado, la formación sacó músculo y demostró sobre el escenario su manera de entender la música folk con letras personales e íntimas, dotadas de cierta cotidianidad, que bailaban entre música tradicional castellana, boleros y alguna jota. Música de situación que bien puede recordar a otros artistas más consagrados que han abrazado sonidos folkies con cierta fiereza, algo desconcertante para quién suscribe pero que cala en el público más independiente de la noche.
La antesala estaba servida. Tras la actuación de Los Hermanos Cubero, el escenario se prepara para recibir a los más esperados de la noche. Morgan se ha convertido desde hace mucho tiempo ya en un grupo adorado por sus seguidores. Ha pasado poco más de un año desde la última visita que la banda hizo precisamente en Nocturama y, a punto de finalizar la gira de Air (2018), vuelven a desplegar sus alas para cubrir la atención de los presentes a golpe de virguería instrumental de sus músicos y la inefable voz de Nina.
Con una clara evolución dentro del repertorio, los temas clave estuvieron ahí. No hay necesidad de listarlos, tan sólo indicar que el paso del tiempo y la cantidad de bolos ha hecho que Morgan haya reposado toda esa experiencia hacia un sonido muy identificable. Los ritmos funks se entremezclan con dosis de rock eléctrico y soul indiscutible, donde la maestra de ceremonias es quién lleva la batuta. Hubo tiempo para introducir un par de encores. La ya famosa intro de "Coming back to life" de Pink Floyd en "Home" y el detalle de "Lose yourself to dance" de Daft Punk dentro de "Another road".
Una vez más, las emotivas "Volver" y "Sargento de hierro" se llevaron el gato al agua y Nina se metió en el bolsillo a todo el público de un plumazo. Ganó de nuevo la banca.
Para terminar, La Noche jugaba en casa y puso el punto álgido de la velada llenando de ruido y synth-rock el aire del Nocturama. La banda, de reciente formación aunque no de recién llegados, dieron paso de manera frenética a los verdaderos encargados de acabar con todas las existencias. A los platos, Pío Paradox & Betty Miserias finiquitaron un Nocturama que ha hecho historia.
Historia por sus quince años, historia por sus nuevas fechas y, una vez más, han puesto de manifiesto que la organización es siempre exquisita, tratando a público y artistas con un cariño esencial. Muchas gracias a La Suite por su dedicación y buen hacer.
A por otros quince años más!!
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