En1994, el dúo británico Everything but the girl publicó Missing, single que pasó sin pena ni gloria hasta que, ¡Oh, cosas de la vida!, un remix realizado por Todd Terry en 1995 la hizo archiconocida.
Hay que reconocerlo. El remix le quedó genial a Todd. Tiene la suficiente garra comercial como para convertir el tema en todo un hit. Pero, ¡qué queréis que os diga! Por mucho que me ponga la música a tope cuando el remix sale por la radio, para mi gusto la versión original es mucho más gratificante (y menos radiada, todo sea dicho de paso).
En Missing se describen las sensaciones que se tienen cuando alguien a quién quieres se va a otro sitio, quizás lo suficientemente lejos como para que ya no vuelvas a verle en el portal de su casa, o en el trabajo, o en el bar de la esquina. Aunque la canción tiene un medio tiempo que pierde fuerza con respecto al remix, sin duda todo lo gana en intensidad. La canción lo merece.
Hay que reconocerlo. El remix le quedó genial a Todd. Tiene la suficiente garra comercial como para convertir el tema en todo un hit. Pero, ¡qué queréis que os diga! Por mucho que me ponga la música a tope cuando el remix sale por la radio, para mi gusto la versión original es mucho más gratificante (y menos radiada, todo sea dicho de paso).
En Missing se describen las sensaciones que se tienen cuando alguien a quién quieres se va a otro sitio, quizás lo suficientemente lejos como para que ya no vuelvas a verle en el portal de su casa, o en el trabajo, o en el bar de la esquina. Aunque la canción tiene un medio tiempo que pierde fuerza con respecto al remix, sin duda todo lo gana en intensidad. La canción lo merece.
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