Hay algunas versiones que no entiendo por qué se hacen, ni entiendo que tengan éxito. Son como pequeños sacrilegios hacia canciones originales más o menos bien elaboradas y que algún "productor" o "remezclador" se ha encargado de defenestrar.
Es el caso de la maravillosa "Valerie" de Stevie Winwood, que ha sido simplificada al contínuo chunda-chunda con una sola frase como letra de la misma. El causante de este desaguisado es Eric Prydz y la titula "Call On Me". Seguro que como transición entre canciones Dance puede colar, pero de ahí a que se convierta en un Hit...Manda truco!
Y el otro caso sangrante es el resultado de levantar de la tumba a unos Boney M y su "Gotta go Home" para transformarlos en un acto de vilipendiaje hacia el honor de Barbara Streisand. Los susodichos son Duck Sauce y su "hit" cañero (y televisivo, por cierto) es "Barbra Streisand".
Definitivamente, hay versiones que no aportan absolutamente nada. Bueno, una cosa si que aportan. Más que aportar, retiran: las ganas de seguir escuchando este tipo de melodías absurdas y monocromáticas durante tres o más minutos. El colmo.
Por si acaso sirve de redención, aquí te pongo la original de Stevie Winwood. Con esto, seguro que estamos salvados y más de uno aprenderá algo.
Estoy bastante deacuerdo con tu reflexión. A colación, hace unos días pensaba (diciéndolo suavemente)en lo prescindibles que eran las versiones de Ana Curra y/o de Amaral del enorme "Heroes" de Bowie. Se incrementa esa sensación cuando se aduce, para más escarnio, que se realizan las versiones en "modo homenaje". Yo a los grandes, tengo la costumbre - llámame raro - de rendirles culto y pleitesía leyéndoles, oyéndoles, recordándoles. Deleitándome con cada momento que puedo disfrutar de su grandeza.
ResponderEliminarPd Saludos desde Granada (Doctor Andrés).
Muchas gracias, Doctor Andrés, por tus comentarios.
ResponderEliminarEs muy difícil hacer una versión que sea capaz de ignorar u ocultar la correspondiente original. Estoy de acuerdo contigo en que a los grandes hay que homenajearles con el recuerdo.
Para eso están sus discos.
¡Ah! Y ya somos dos raros...
Un abrazo enorme!!