Esta crónica es rara, pues el concierto fue hace justo una semana, pero tratándose de Xiu Xiu está bien que así sea: ellos son muchísimo más raros. O mejor dicho él: Jamie Stewart es el fundador y único componente fijo de la banda. Esto está sacado de la Wikipedia, y será la única información que pondré, pues no conozco ningún nombre de los músicos, de los discos, de dónde son, etc.
Sí tuve la suerte de oir sus cinco primeros discos hace unos años y, tras el concierto del otro día sigo pensando lo mismo: son muy interesantes en pequeñas dosis.
El concierto comenzó tras un pequeño ritual que hicieron los cuatro músicos, comprensible sólo para ellos en medio de un silencio sepulcral. Luego una canción lenta, susurrada (al estilo Beth Gibbons), mientras uno de ellos toca una guitarra Eastwood con cuatro cuerdas de bajo y dos de guitarra, conectada a dos pedales (un bassmaster y otro boss que no reconocí) y pulsando las cuerdas con un arco. "Son muy raros" decían detrás de nosotros alguno de los 70 espectadores. Algunos otros se animaban a compararlos con otros grupos, como para tener una referencia que les hiciese sentir más cómodos. Esto fue más fácil después de su versión de Ceremony, de New Order. Y la verdad es que se parecen algo a Joy Division: cantante entre el espasmo y el susurro, bajo agresivo muy guitarrístico y percusión de ritmo fijo.
La verdad es que fue una grata sorpresa (tuve la oportunidad de verlos hace ocho años en una sala en la que no consiguieron ajustar el sonido, y cada campanada se nos clavaba en los tímpanos;tuvimos que marcharnos tras dos canciones). Sonaron francamente bien, y se entregaron a su música como los seguidores de una secta. La secta de los bichos raros.
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