Cuando Maga encontró a The New Raemon y se dijeron hasta luego

Dos viejos amigos se subieron al escenario del Nocturama el pasado 28 de agosto, en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de Sevilla. Haciendo uso de un destino común, los sevillanos Maga aparecieron en comunión con The New Raemon, forjando una vez más una actuación impecable.

A pesar de la corta duración total del concierto (una hora y cuarto, que resulta algo escaso dados los recitales previos vividos en este ciclo), se notaba la química más que desarrollada entre ambos. Ramón Rodríguez (The New Raemon) aparecía como uno más en la formación, rodeado por los componentes de Maga, en una noche por la que iban a pasar algunos de los temas más conocidos de ambos. Esta noche, en concreto, era más especial que otra cualquiera. Aunque en la edición del Nocturama del año pasado, Ramón anduvo por aquí previo a la presentación oficial de su último álbum, Tinieblas, por fin, la de esta ocasión era mucho más emocionante. El motivo es que era uno de los últimos conciertos que el barcelonés ofrecía antes de enfrascarse en otra serie de proyectos personales, según anunció hace ya tiempo en sus perfiles sociales.

Por tanto, la noche prometía y no defraudó. Con sonido excelente, desfilaron temas alternados de ambos artistas, como Marathon man, Consciente hiperconsciente, Sucedáneos, Te debo un baile, El ruido que me sigue siempre, Silencio, ... con un bis regalo especial de Miguel Rivera, cantante de Maga, blandiendo su guitarra española y bajando al público más cercano para interpretarles algo que este humilde redactor no fue capaz de escuchar ni identificar, dada la cantidad de personas agolpadas y la imposibilidad de conseguir un silencio pleno en el entorno.

Maga jugaba en casa y The New Raemon se sentía como en ella. No en vano, además de haber visitado la ciudad en varias ocasiones, de todos es sabido que tira de sus compañeros de escenario cuando debe de realizar actuaciones por diversos puntos del país, así que se conocen más que bien. De hecho, Ramón ha sido uno de los productores del que hasta ahora es el último trabajo de los sevillanos, Satie contra Godzilla (2011), por lo que han pasado muchas horas juntos en estudio y escenarios. Y eso se transmite en la soltura y comodidad con la que se mueven todos los miembros de esta especie de supergrupo resultante de dos formaciones. Así, la única pega que le puedo dar al concierto fue su duración. Creo que no soy el único al que le hubiera gustado un poco más pero, lo que hubo, supo a gloria.

Una vez más, desde aquí queremos dar la enhorabuena a La Suite por acumular otro gran éxito más a este Nocturama, lo cual hace presagiar que la edición que viene será aún más interesante por lo alto que han dejado el listón.