En el mundo de la música hacen falta profesionales que pongan las cosas en su sitio, participando e implicándose en todas sus facetas. Ese es el caso que nos ocupa. Hace poco, tuve en mis manos el último trabajo de Loquillo y pude comprobar que poseía una nota de presentación escrita por una artista imprescindible dentro de la llamada contracultura nacional. Silvia Grijalba es periodista y escritora, pero sobre todo es una auténtica amante de la música a la que ha puesto a su servicio todo su saber hacer y con la que hemos tenido el placer de conversar acerca de su obra y sensaciones. Bienvenidos al espacio donde se funden música y palabra.
Por una parte, si te podría decir que he aprendido de mi abuela. A la hora de escribir la novela, me he dado cuenta de que ella tenía cosas que yo también he ido teniendo. Después, otra parte fundamental ha sido mi padre, ya que gracias a él viene todo el amor que tengo por la literatura y por la música. Ha sido una persona muy culta, con una biblioteca enorme. Le encantaba el jazz y yo empecé a escuchar música gracias a él y a Elvis Presley. Si hablamos de cosas tangibles y de valores, quizás es quién más me ha enseñado. Por otro lado, mi madre y mi abuela...Bueno, más bien, mi abuela. Y también casi todas mis parejas me han enseñado algo. Cada vez que he estado con alguien, y yo soy de tener pareja larga y la mayoría de ellos han sido músicos o han tenido que ver con el arte, si que me han ayudado mucho en cada faceta de mi vida y he aprendido mucho de ellos. Al final, cuando formas una pareja, estás cambiando un poco de vida, así que han formado una parte importante de mi evolución.
Es decir, podemos decir que todavía estás en pleno proceso de aprendizaje...
Si, creo que si, que eso es bueno. Es importante tener ese aprendizaje. La gente que he conocido y que más admiro, como por ejemplo John Giorno que tiene setenta y pico años, pues de él he aprendido muchísimo. El sigue estando interesadísimo por todo lo que está relacionado con la cultura.
Lo de Depeche Mode surgió hace muchísimo tiempo, y es un grupo que me gusta mucho. Me preguntaron en la editorial La Máscara que si quería escribir algún libro, porque en aquella época anterior a El Mundo escribía cosas de música, y les dije que, quizás, el grupo que más me apetecía era Depeche Mode. En aquella época no había ninguna biografía del grupo ni siquiera en inglés. Normalmente, cuando haces una biografía, vas cogiendo información de otros sitios y me costó bastante, aunque tuve mucha ayuda del presidente del club de fans de Depeche Mode... La verdad es que fue muy interesante, me gustó mucho. Hay pocos personajes de los que no se haya escrito biografía o no se haya escrito bastante que me apetezca hacer. Ahora mismo, me apetece más hacer ficción. Quizás, si hiciera una biografía tendría que ser por encargo y de alguien que me gustara mucho. No es algo que tenga en la cabeza.
3.- De biógrafa a ensayista. “Dios
salve a la movida” (2006) y “Palabra de Rock: antología de escritores
españoles” (2008) son buena muestra de tu asociación simbiótica al mundo de la
música. Dime, como conocedora contemporánea de aquella época ¿cualquier tiempo
pasado fue mejor?
Yo creo que mitificamos un poco la época de la Movida. Fue una época muy creativa y fue fantástica, pero había tan poca gente que la vivió... yo, de hecho, no la viví. Escribí el libro con lo que había visto por otro lado y con las cosas que yo veía desde Málaga. Creo que la Movida es una época importante dentro de la vida en España, pero ahora también se están haciendo cosas interesantes en el mundo del arte. Incluso ahora que hay crisis y lo comercial no llega a ningún lado, porque no se puede vender demasiado, está siendo interesante desde un punto de vista creativo.
4.- Tu implicación con la cultura ha
ido más allá, llevándote a organizar el festival Palabra y Música, festival
internacional spoken word, en España desde 2005, por el que han pasado artistas
de la talla de Nacho Vegas, Lee Ranaldo, Nick Hornby, y la mismísima Patti
Smith. Una apuesta novedosa en nuestro país ¿qué ocurrió con él?
Pues que dejó de haber dinero para todo y también dejó de haber dinero para hacer el festival. Hubo un ajuste presupuestario en el Teatro Lope de Vega de Sevilla, también hubo un cambio de planteamiento, para hacer cosas que fueran más populares, en cierta forma, pero la verdad es que estoy muy satisfecha de este festival. Fue el primero en mezclar música y poesía, o música y literatura y, a partir de ahí, se han hecho muchos más. Creo que fue un gran trabajo, del que estoy muy orgullosa. De hecho, estoy intentando recuperar este festival porque creo, y no es por nada, que ha sido de las cosas más interesantes que se han hecho en España. En el arte también hay que arriesgarse, aunque haya crisis, y creo que se están equivocando en algunos ayuntamientos al hacer todo lo contrario.
5.- Compaginando con tus labores
periodísticas y narrativas, tu alter ego, Marina Radis, también ha traspasado
la línea de la composición musical, experimentando con sonidos cercanos a lo
industrial y, sobre todo, creando letras oscuras y opresivas. Siendo quizás tu faceta
menos conocida, ¿nos puedes decir qué tal va tu proyecto? porque en tu perfil
de MySpace se decía que crearías Viperina y las Malas Lenguas, todo un
propósito de intenciones.
Ese fue un proyecto que pensé en hacer, en un momento determinado, porque yo toco el theremín y eso se quedó un poco en el tintero porque al final me dediqué más a las labores de escritora. Pero, durante un tiempo, estuve haciendo letras para Javier Colis y fue una época muy buena de mi vida. Estuve de gira con el grupo Javier Colis y las Malas Lenguas y, si... Fue una época bastante agradable y para mi es muy gratificante y me divierte mucho eso de hacer letras, estar tocando, estar de gira...
¿Lo sigues teniendo como algo pendiente, en mente? ¿O, no, simplemente si surge?
Si surge, pues bien pero, aunque fue una época muy importante de mi vida, ahora mismo estoy centrada en la escritura de ficción, pero si...Cuando lo hice, me parecía que era genial y a mi hacer letras de canciones es algo que me gusta mucho. O sea que si alguien me lo volviera a proponer y se ve la oportunidad, a mi me encantaría.
6.- Has dicho, en múltiples
entrevistas, que por fin pudiste escribir el libro sobre tu abuela que estabas
deseando. De vueltas con la música, ¿cuál podría ser un hipotético, o no tan
hipotético, libro que te gustaría escribir?
Hubo una conferencia que di este verano en El Escorial, invitada por Luis Alberto de Cuenca, en uno de sus cursos que trataba sobre Bram Stoker y Drácula, y yo hablé sobre el vampiro y la estrella del rock. Esa tesis que inicié en esa conferencia, se podría desarrollar mejor en un libro. Es interesante ese paralelismo entre el vampiro literario y la estrella del rock.
Fue con New Order, en un concierto celebrado en Marbella en el ochenta y algo, no recuerdo exactamente.
8.- Ahora, en pleno siglo XXI, la
música está evolucionando hacia un plano de subsistencia más cercano al
público, con una auténtica eclosión de estilos y formaciones. Con toda tu
experiencia, amor por la música y como parte directamente afectada, ¿qué
opinión te merece la situación actual en la que se encuentra la cultura?
Hay dos temas fundamentales. Por una parte, en España no le damos a la cultura la importancia que se merece, y que pensamos que puede ser gratis, sobre lo que habría mucho que hablar porque, realmente, no es gratis. Al final, le estás pagando a Telefónica un ADSL que hace que te puedas bajar las cosas. Lo que pasa es que el dinero no va a los artistas, sino que va a otros. Por otra parte, no se valora el trabajo de los artistas. Hay mucha gente que piensa que trabajar es levantarse a las siete de la mañana y cavar zanjas...no entiendo muy bien por qué tiene que ser así...Hay que tener en cuenta que internet existe y que el mercado del disco se tiene que adaptar a eso, pero todavía tiene que saber cómo hacerlo. Ahora, está pasando con los libros... Lo importante es que la gente reciba una educación en la que entiendan que el arte es un trabajo y que si ese trabajo no se paga, la gente terminará siendo amateur. Hay una gran oferta en internet, pero no todo el mundo puede acceder a ella, por lo que creo que también debería haber filtros para que la gente pudiera acceder.
9.- Tengo ganas de preguntarte esto:
David Bowie ha vuelto. ¿Qué te parece?
El single y el vídeo (Where are we now) me gustan muchísimo. Me parece fantástico que haya vuelto, toma un punto de vista muy valiente, hablando de la muerte y de cosas que en el mundo del pop se supone que no se pueden hablar. Es un disco maduro, y está bien que se hagan estos discos maduros.
10.- Silvia, durante todos estos
años has estado amparada detrás de las líneas escritas. ¿Nunca te has planteado
la posibilidad de saltar a las ondas? ¿Radio, TV?
Pues, si. A veces en televisión colaboro en el programa de Sanchez Dragó haciendo crítica de libros... bueno, creo que ya no está el programa en Telemadrid... y, si. A mi siempre me ha gustado hacer radio, y las veces que he hecho radio he disfrutado mucho. Yo estaría encantada, pero aún no me ha llamado nadie para hacerlo. Estaría feliz de poder hacer radio.
11.- Según parece, el cine también
contará con tu participación, en la adaptación de tu libro “Atrapada en el
Limbo”...
En principio era algo que iba a hacer con Manuel Martín Cuenca, pero al final es algo que se ha truncado. La productora no ha conseguido el dinero suficiente y, de momento, eso está ahí, parado... La crisis lo invade todo.
Es una lástima, pero si esa película se llegase a realizar, por curiosidad, ¿has pensado en una posible banda sonora?
Si, pensamos en ello. Recuerdo que cuando estábamos haciendo el guión yo quería que el leit motiv de la película fuese el This is the day, de The The, que era una canción alegre y muy buena y que resumen muy bien lo que quiere transmitir la película.
12.- Y, para terminar, Silvia, me
gustaría saber qué tipo de música escuchas por ejemplo un día como hoy, en el
que sabes que ibas a ser entrevistada.
Si te digo la verdad, no estaba escuchando nada (risas)...porque los días que escribo, no escucho mucha música porque me entretiene y me lleva a otros lados (risas)...
Pues, después de este tino que he tenido, sólo me queda darte las gracias por atenderme y por
apoyar nuestro blog. Ha sido un verdadero placer hablar contigo. Espero que coincidamos pronto.
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